lunes, 30 de noviembre de 2020

LUMPENARG

 

Guillermo Rojas

Murió Maradona, para los que saben del tema el mejor jugador de futbol de la historia, como persona un indeseable que termino su vida sepultado por una multitud de vicios y miserias de todo tipo.

Kirchnerismo y lumpenaje

Como no podía ser de otra forma la caterva infame que gobierna se prendió del cadáver para obtener algún redito político que compensara el monumental descredito sufrido por la “administración de la pandemia”,  mentira global con la que fundieron al país entero, la absoluta inutilidad en seguridad y en dar mínimas soluciones al desastre económico que no fuera echarle la culpa a los cipayos que los antecedieron. Ese era el norte del peor gobierno que he vivido.

El kirchnerismo se frotaba las manos esperando ser protagonistas de un entierro en olor de multitudes. Desgraciadamente para ellos se convertirían en protagonistas como lo vienen siendo, de las leyes de Murphy y como todo lo que pueda salir mal sale mal,  el homenaje se transformó en un simiesco caos que no vamos a relatar aquí porque ya se ha narrado hasta el cansancio y visto por diversos medios.

 Solo diremos que la calle y la Casa Rosada, donde  los  perversos que gobiernan intentaron velar al muerto fue tomada por asalto por el malandraje futbolero, al que ellos conocen muy bien, aunque tengan el tupe de negarlo, porque les sirven episódicamente como mano de obra para necesarios y pagos desmanes y les dan en contraprestación, patente de corso para delinquir: robar, matar traficar drogas e interminable etc. Toda la partidocracia,  pero el kirchnerismo en especial, sabe bien de los barras y conocen que son delincuentes de la peor especie.

La cosa termino con balas de goma y gases y el apurado retiro del cajón hacia su destino definitivo. La Reina Batata confesa admiradora de los barras a los que ve como hombres apasionados, Alberto con su celular repleto de festivas selfies durante el sepelio y el resto de la cría de funcionarios que no funcionan debieron refugiarse en las oficinas por temor a los mismos tipos que convocaron. Ellos mismos desataron el caos al no permitir entrar más gente a la capilla  ardiente. Que bah desataron el caos al convocar a tal dislate que como de costumbre  no podían controlar.

 Argentina lumpen

La multitudinaria función maradoniana dejo patente el embuste pandémico. Pero lo más preocupante es lo que desnudo el velorio colectivo durante el cual Marx de haberlo visto hubiera redactado un capitulo argentino al 18 de Brumario y Marcuse no se hubiera referido a la liberación del Eros filosófico sino el Eros escatológico (con la aclaración castellaniana de que lo otro es con “j”),

En efecto la eclosión lumpen es preocupante y mucho más la penetración de la mentalidad lumpen en el imaginario colectivo de gran parte de los argentinos incluso en la cabeza de muchos que uno cree inteligentes, incluidos  quienes uno cree que tienen las cosas claras. Es algo que florece en 1983 y se desarrolla de forma arrasadora durante la democracia juntamente con la destrucción de la autoridad y la miseria económica,

 Es la mentalidad que cree que cualquier cosa es lícita a cambio de un poco de felicidad. En definitiva es una mentalidad de resentidos y derrotados. A esa mentalidad el kirchnerismo ha hecho aportes decisivos. Si Marx  viera al kirchnerismo le recordaría la Sociedad del 10 de diciembre descripta en el 18 de Brumario de Luis Bonaparte

integrada por roués arruinados, con equívocos medios de vida y de equívoca procedencia, junto a vástagos degenerados y aventureros de la burguesía, vagabundos, licenciados de tropa, licenciados de presidio, huidos de galeras, timadores, saltimbanquis, lazzaroni, carteristas y rateros, jugadores, alcahuetes, dueños de burdeles, mozos de cuerda, escritorzuelos, organilleros, traperos, afiladores, caldereros, mendigos, en una palabra, toda esa masa informe, difusa y errante que los franceses llaman la bohème: con estos elementos, tan afines a él, formó Bonaparte la solera de la Sociedad del 10 de diciembre, «Sociedad de beneficencia» en cuanto que todos sus componentes sentían, al igual que Bonaparte, la necesidad de beneficiarse a costa de la nación trabajadora”

La cultura maradoniana es cultura lumpen idolátrica en su máxima expresión y afín a lo reseñado anteriormente: cualquier crítica al ídolo es rechazada con odio e irracionalidad: “vos que hablas ¿sos perfecto?” “será un canalla pero nos dio alegría” o “vos lo criticas porque es del pueblo y es villero”, “sea lo que sea nos dio felicidad”.

Uno se pregunta cómo construir una nueva Argentina inmersa en ese mísero hedonismo. Como construirla con gente que piensa de esa forma. Uno se pregunta cómo Argentina sobrevive aun. Sera cierto que cada Nación tiene un ángel de la guarda y Argentina también lo tiene.


4 comentarios:

Esteban Nievez dijo...

Dicen: "El Diego le dio la maxima alegría al pueblo"
Pobre país si la maxima alegría es ganar un campeonato de futbol mundial; pensar que el primer patriota que derroto a los ingleses, Santiago de Liniers es un completo olvidado, que a mi entender debería ser el arquetipo del argentino, que país, por Dios.

Anónimo dijo...

Jose Martin Garciarena Ucelay
​Habrá alguna relación entre el DAO (Organizaciones Autonomas Descentralizadas) que se está desarrollando fuerte en EEUU, a traves de la blockchain, en la futura disolución de los estado-nacion ?
https://www.youtube.com/watch?v=rP5iPz6bUfA

Anónimo dijo...

¿Vieron la explicación que dió Patricio Lons sobre maradona??..jaja

Red Patriotica Argentina dijo...

aclaro una cosa para aquellos que quieran postear en el foro: No voy a publicar comentarios que no guarden relación con el tema del articulo, Sino esto se convierte en cualquier cosa. Si quieren hacer otras observaciones diríjanse al mail de la pagina, gracias.