viernes, 14 de diciembre de 2012

RIQUEZA Y "HOLOCAUSTO" DEMOGRAFICO

CADA VEZ EN MENOS MANOS
Este proceso se ha estructurado sobre dos ejes: la concentración de la riqueza y el control de la natalidad a nivel mundial, para que el ejercicio de la apropiación y concentración de la riqueza no se vea afectado por quienes pasan a ser población sobrante en el sistema.
 
I. NUEVO ORDEN MUNDIAL Y CONCENTRACIÓN DE LA RIQUEZA
 
A) Cuando se habla de Globalización o Nuevo Orden Mundial se hace referencia al proyecto político de dominio y control del mundo por parte del capitalismo financiero moderno, fundamentalmente especulativo, a través de las grandes familias bancarias europeas anglosajonas y angloamericanas y de las grandes corporaciones industriales, en su gran mayoría de propiedad de aquéllas, aliadas a las monarquías europeas todavía vigentes.
 
En otras palabras, el Nuevo Orden Mundial significa la primacía y preponderancia política y económica que ha adquirido el poder financiero internacional esencialmente especulativo, que por un lado se ha independizado y aislado del proceso productivo económico, para generar la riqueza virtual que le posibilita la depredación de riquezas y recursos y el acaparamiento de los mismos, y que por otro lado se ha “apropiado” de las estructuras políticas gubernamentales y estatales de los países desarrollados para imponer su política. Este dominio mundial se ha estructurado a través del ejercicio fáctico de un Único Gobierno Mundial, que implica la globalización económica (el mundo como una única unidad productiva), el debilitamiento de los Estados-Nación y su reemplazo por la soberanía supranacional de una elite de intelectuales y de banqueros mundiales (tal como lo explicitaran los propios involucrados en declaraciones realizadas en junio de 1991), el sincretismo cultural-religioso (una religión cósmica-universal para reemplazar las distintas confesiones de fe y creencias y sus respectivas culturas), la ONU como sistema supra-nacional para imponer las políticas sociales, económicas, culturales que permitan el dominio político del mundo por parte del Poder Financiero transnacional (con el objetivo a largo plazo de transformarse en un único gobierno mundial), la promoción del conflicto ideológico «Izquierda vs. Derecha», como pantalla y velo que sirve para ocultar el dominio político imperialista y neo-colonial sobre los pueblos y naciones formalmente soberanos.
 
Que este proceso no se desarrolló en forma casual, sino que fue diseñado y planificado para que se desarrollara de esta manera, lo certifican respetables miembros del establishment americano, que a mediados de los ’60 y en una investigación de envergadura han puesto al descubierto y describieron con lujo de detalles ese proyecto mundialista globalizador por parte del poder financiero mundial, ya a comienzos del siglo XX: «los poderes del capitalismo financiero tenían otro propósito de largo alcance, nada menos que crear un sistema mundial de control financiero en manos privadas, capaz de dominar el sistema político de cada país y la economía del mundo como un todo». Además, con toda claridad estos investigadores pusieron en evidencia la identidad de los dueños de este proyecto de unificación uniforme del planeta, al definirlos como partícipes de una «red anglófila internacional, que opera en la forma que la derecha cree que actúan los comunistas»1.
 
Este sistema de control financiero en manos privadas se configuró mediante la creación de una moneda de valor internacional, fabricada por un conjunto de bancos privados –el dólar-, y mediante la institucionalización del control de los bancos centrales de cada país, a través del Banco de Pagos Internacionales, creado en 1929 y asentado en Suiza.
 
Para llevar a cabo el dominio del sistema político de cada país, en líneas generales el poder financiero global ha creado diversos dispositivos -el Instituto Real de Asuntos Internaciones (1919, con sede en Londres), el Consejo de Relaciones Internacionales (1921, con sede en Nueva York), y posteriormente de Diálogo Interamericano (1982, con sede en Nueva York, para coordinar y supervisar la Social-democracia latinoamericana y el Foro de San Pablo). Para imponer un único sistema económico mundial, manejar la economía como un todo e impulsar la globalización financiera-productiva, ese mismo poder financiero-industrial ha creado, entre otras instituciones, el Consejo de las Américas (1965) y la Comisión Trilateral (1973)2.
 
A través de este dispositivo político-económico, el poder financiero ha orientado el desarrollo económico y social del mundo hacia la paulatina e incesante acumulación de la riqueza en sus manos, produciendo el siguiente resultado histórico al finalizar el siglo XX: El 2% de los adultos del mundo poseen el 51% de la riqueza; los Estados Unidos, Europa Occidental y Japón-Australia concentran el 88% de la riqueza mundial [34%, 30% y 24% respectivamente], en una proporción en la que 1 persona gana u$s 1.000 -- 9 personas ganan u$s 1.- cada una3; mientras que 3.700.000.000 de habitantes en el mundo [57% de la población mundial] perciben un ingreso de 1 ó 2 DÓLARES POR DÍA4.
 
Que esto último no era un acontecimiento azaroso o impensado, lo demuestra el hecho que los “dueños” de este proceso previeron en los mismos inicios de esta ofensiva plutocrática y oligárquica sobre las riquezas del mundo que gran parte de la humanidad no iba a tener acceso a la riqueza que se creara a partir de ese momento: «los principales cambios económicos están en el horizonte, independientemente de los cambios futuros en los índices de crecimiento poblacional»5.
 
Al mismo tiempo que programaron y ejecutaron el acaparamiento y apropiación de la riqueza mundial, estos grandes grupos de poder decidieron y planificaron la «necesidad» de ralentizar y disminuir el crecimiento poblacional mundial («Crecimiento poblacional Cero»), porque los «nuevos» habitantes por venir no iban a tener acceso a la riqueza acaparada por ellos.
 
LA IZQUIERDA FUNCIONAL A LA OLIGARQUIA FINANCIERA
II. NUEVO ORDEN MUNDIAL Y HOLOCAUSTO DEMOGRÁFICO PLANETARIO
 
Es así que al mismo tiempo que se inició la ofensiva económica, financiera y política sobre los países del Tercer Mundo por parte de la oligarquía financiera-industrial nucleada básicamente en la Comisión Trilateral, se diseñó y promovió el Holocausto demográfico mundial, inicialmente denominado «control del crecimiento poblacional» o «control de la natalidad», para que estos auto-pretendidos «dueños del mundo» se aseguraran el control y dominio de las riquezas y recursos naturales del mundo entero. Este proceso fue iniciado y ejecutado en forma sistemática a partir de la década de 1960, y ha producido lo que en Demografía se conoce como el «Invierno demográfico planetario» o «envejecimiento poblacional», porque en esta instancia los ancianos y mayores de 60 años aumentan en número, mientras disminuye la cantidad de niños y adolescentes menores de 15 años.
 
Los documentos «liminares» de este proyecto son:
 
1. Declaración sobre población por parte de 30 líderes mundiales (1966)6, en el que se plantea que el crecimiento poblacional sin control representa un peligro para la paz mundial y que los hijos son causa de la pobreza de los padres, razón por la cual sanciona dogmáticamente como derecho humano básico decidir la cantidad de hijos y el espaciamiento entre ellos, desplazando el derecho a la vida como derecho fundante;
2. Proclamación de Teherán (1968), presentada en la Conferencia Internacional sobre Derechos Humanos, en Irán: § 16: «[…] Los padres tienen el derecho humano fundamental de determinar libremente el número de sus hijos y los intervalos entre los nacimientos»7;
3. Población mundial: Un desafío para las Naciones Unidas y su sistema de agencias (1969), en el que se urge a todos los organismos de la ONU para que colaboren en el esfuerzo antinatalista: Banco Mundial, OMS, UNESCO, FAO8;
4. Población y el futuro americano (1972): elaborado por la Commission on Population Growth and the American Future, en el que se diseña toda la estrategia para el control de la natalidad en Estados Unidos9;
5. Memorando 200/74: elaborado en 1974 por el Consejero de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, en el que se oficializa el control del crecimiento poblacional como estrategia para salvaguardar la seguridad nacional de aquel país y sus intereses de ultramar, planteando los objetivos de «tomar medidas que reduzcan la fertilidad [a nivel mundial] en las décadas de 1970 y 1980», posibilitar con ello el crecimiento económico y el ingreso per cápita de los países en desarrollo, de manera de evitar conflictos sociales y políticos que pongan en peligro el suministro de los recursos que los países en desarrollo poseen y que el mundo desarrollado necesita, «acomodar un crecimiento poblacional continuo de hasta 6 mil millones de personas para la mitad del siglo XXI» y «mantener el nivel final tan cercano como sea posible a 8 mil millones» hacia el año 2075, impidiendo que alcance la cifra de 10 mil millones ó 13 mil millones de habitantes en el mundo. Sobre todo, insiste en las tácticas de disimular las actividades de Estados Unidos en el ámbito poblacional, mediante acciones y agentes que actúen dentro de los países en desarrollo, y de enfatizar el derecho de los individuos y parejas a determinar libremente y responsablemente el número y espaciamiento de sus hijos10;
6. Decisión Presidencial de Seguridad Nacional 314/75: En 1975, oficialización vigente hasta hoy de este último informe por parte del poder ejecutivo de los Estados Unidos como política de Estado11; 7) Borrador de Directiva de Decisión Presidencial (1994): esbozada en junio de 1994, por el poder ejecutivo «demócrata» de los Estados Unidos, a través del Consejo de Seguridad Nacional, para continuar a nivel mundial con la política de control del crecimiento poblacional mundial, en función del Memorando de 1974 ya citado, para retomar en forma oficial la política imperialista del control de la natalidad12.
En este último documento, el dogma del derecho «básico» de decidir la cantidad de hijos y su espaciamiento constituía el fundamento reiterado permanentemente, por cuanto la meta de la política norteamericana sobre el crecimiento poblacional mundial debía ser la de «dirigir una respuesta internacional global, inmediata y concertada, a las tendencias del crecimiento poblacional», sobre la base de tres objetivos que se refuerzan mutuamente, y que constituyen la prueba evidente de la influencia del proyecto y del ideario de la elite:
1º) «promover el respeto de los derechos y capacidades de los individuos y de las parejas para determinar libre y responsablemente el número y el espaciamiento de sus hijos»;
2º) «mejorar la salud reproductiva individual, atendiendo especialmente las necesidades de salud reproductiva de mujeres y adolescentes, y las necesidades generales de salud de bebés y niños»; para lograr con ello
3º) «reducir el índice de crecimiento poblacional tan rápido como sea posible a los niveles que sean consistentes con un desarrollo sustentable».
Pensando en la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, a celebrarse en El Cairo (Egipto) poco tiempo después (setiembre de 1994), el borrador esbozado proponía que Estados Unidos buscara un consenso «que provea un fundamento sólido para la futura cooperación internacional sobre población, y que sea consistente con la política norteamericana». Específicamente, proyectaba que Estados Unidos se esforzara por lograr «un consenso internacional sobre aproximaciones programáticas de largo plazo hacia las metas de reducir el crecimiento poblacional mundial».
En este horizonte estratégico, el objetivo político del gobierno de ese momento para la famosa Conferencia en El Cairo era, en el campo de los derechos reproductivos, «reforzar y fortalecer las recomendaciones de conferencias previas […] para asegurar que los individuos y las parejas tengan el derecho a decidir libre y responsablemente el número y el espaciamiento de sus hijos», y que «los gobiernos respeten este derecho»13.
Queda claro que la eliminación sistemática de seres humanos es lo que permite asegurar este control planetario de recursos por parte de este poder plutocrático imperialista, valiéndose básicamente de las Naciones Unidas y de Fundaciones (u Organizaciones No-gubernamentales) propias.
1) En el caso de la ONU, ésta deja de ser un organismo internacional, para convertirse paulatinamente en un organismo supranacional, que a través de sus distintas agencias y secciones –Banco Mundial (BM), Organización Mundial de la Salud (OMS), Fondo Monetario Internacional (FMI), UNESCO, etc.- impone políticas globales “consensuadas” en Conferencias, Tratados, Cumbres y otras actividades afines, obligando a la ejecución de políticas de control de la natalidad, denominadas eufemísticamente de “salud reproductiva” y “derechos reproductivos”. En tal sentido, se puede consultar la página Web oficial de la ONU, en la que se puede comprobar que se encubre y oculta el problema de la injusta y desigual distribución de la riqueza, ya que no hay una sola referencia oficial al tratamiento de este tema, ni en documentos, ni en Asambleas y reuniones oficiales. Pero todo lo contrario ocurre con la promoción del control de la natalidad, la cual es promovida oficialmente en forma integral y transversal a través de los distintos organismos que componen la ONU. Bien se puede decir, sin el más mínimo margen de error, que las Naciones Unidas es un organismo secuestrado por la Plutocracia Financiera Mundial, para disimular y oficializar la injusta y desigual distribución de la riqueza en el mundo, y al mismo tiempo llevar a cabo el control de la natalidad a nivel mundial, el cual es el otro objetivo paralelo del Imperialismo Internacional del Dinero.
 
2) En el caso de las fundaciones y organizaciones «no-gubernamentales» propias, han sido creadas y son controladas o dirigidas por miembros del poder financiero internacional, para impulsar y promover este Holocausto demográfico en el ámbito de la llamada “sociedad civil”. Entre ellas se cuentan el Population Council, respaldada financieramente durante la década de los ´90 por los gobiernos de Australia, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Japón, Holanda, Noruega, Nueva Zelanda, Suecia y Reino Unido); la Ford Foundation; la International Planned Parenthood Federation
 
3) La aplicación de las políticas antinatalistas ha provocado el llamado envejecimiento poblacional (o “invierno demográfico”), en el que por primera vez en la historia de la humanidad, de seguir la tendencia demográfica actual, habrá EN EL AÑO 2050 MÁS CANTIDAD DE PERSONAS MAYORES DE 65 AÑOS que NIÑOS Y ADOLESCENTES MENORES DE 15 AÑOS14. Actualmente, en las regiones más desarrolladas, más del 20% de la población es MAYOR DE 60 AÑOS, mientras que será el 33% en el año 2050. Por su parte, en las regiones menos desarrolladas, el 8% de la población es MAYOR DE 60 AÑOS, mientras que será del 20% en el año 2050. Al año 2050, África será el único continente en el que habrá mayor cantidad de niños y adolescentes que personas mayores de 65 años.
 
4) Como muestra del carácter siniestro de este proceso, el envejecimiento demográfico constituye un Negocio de los Ricos, financiado por los Pobres, ya que:  a) Por un lado, las ONGs SE SUBSIDIAN MEDIANTE FONDOS OFICIALES ESTATALES, como es el caso del POPULATION COUNCIL, cuyas fuentes de financiamiento estatal gratuito han sido del 58,3% en el año 2005, 57% en el año 2006, del 73% en el año 2007, del 80,74% en el año 2008. Idéntico es el caso de la mayor red abortista del mundo, la INTERNATIONAL PLANNED PARENTHOOD FEDERATION (IPPF), cuyas fuentes de financiamiento estatal gratuito han sido del 74,58% en el año 2005, 71,87% en el año 2006, 71,93% en el año 2007, 76,51% en el año 2008. Es decir, para promover sus planes antinatalistas, los ricos se subsidian con fondos públicos estatales. b) Por otro lado, los pueblos «en vía de desarrollo» son obligados a ejecutar políticas demográficas antinatalistas contratando deuda externa (básicamente, mediante el Banco Mundial), con lo cual los pueblos y los ciudadanos del mundo subsidian gratuitamente el negocio genocida de los ricos.
 Dicho sintéticamente: los ricos del mundo han decidido controlar el crecimiento poblacional mundial, han planificado las políticas correspondientes y las han ejecutado sin que a ellos les cueste un solo dólar, ya que se subsidian con fondos públicos estatales. Son las víctimas de este plan, los pueblos de los países “en vías de desarrollo”, las que lo pagan realmente, porque son obligados a endeudarse para reducir el crecimiento de sus poblaciones, mediante el mecanismo de la deuda externa. Es decir, los pobres del mundo pagan su propio exterminio, mientras que a los ricos del mundo les sale gratis.
 
CONCLUSIÓN:
 
Los datos y cifras oficiales y privados no mienten: en la época moderna y contemporánea, el Nuevo Orden Mundial ha provocado una concentración de la riqueza en muy pocas manos, a favor de los dueños del poder financiero internacional y en perjuicio de casi el 60% de la población mundial, en una forma que no tiene parangón en la historia. Para poder “gozar en paz” de este proceso de acumulación de la riqueza, ese mismo poder ha promovido el control de la natalidad y la reducción de los habitantes del mundo mediante un perverso mecanismo, a través del cual las propias víctimas pagan por su propio exterminio, mediante el endeudamiento externo crónico
 
Prof. José Arturo Quarracino
Diciembre de 2010
 
1 Carroll Quigley, Tragedy and Hope. A History of the World in Our Time, New York, The Macmillan Company, 1966, pp. 277-278 y p. 796.
2 John Coleman, Committee of 300; Alan Jones, Como funciona realmente el mundo, Buenos Aires, Segunda Independencia, 2004; Martín Lozano, El Nuevo Orden Mundial. Génesis y desarrollo del capitalismo moderno, Madrid, Alba Longa, 1996. Para Diálogo Interamericano en particular, se puede consultar http://www.thedialogue.org/membership/default.asp. Este organismo representa el ROSTRO «PROGRESISTA», en Hispanoamérica, DEL CAPITAL FINANCIERO INTERNACIONAL.
3 UNU-WIDER [United Nations University-World Institute for Development Economic Research], World Distribution of Household Wealth, 5 December 2006, London. Informe elaborado por Anthony Shorrocks, James Davies, Susanna Sändstrom, Edward Wolff. Cf. Fondo de Población de Naciones Unidas, Estado de la Población Mundial 2004, New York, 2004.
4 Fondo de Población de Naciones Unidas, Estado de la Población Mundial 2004, New York, 2004. Population Council, Annual Report 2005.
5 Rockefeller Commission Report, Population and the American Future, New York 1972, Chapter 4.
6 Statement on Population from World Leaders (1966) [Declaración sobre Población por parte de líderes mundiales (1966)], en http://www.popcouncil.org/mediacenter/popstatement.html.
8 Encuentro organizado por UN-USA, en New York.
9 Center for Research on Population and Security, Population and the American Future, New York, 1972.
10 Memorando 200/74. Implicancias del crecimiento poblacional mundial para la seguridad nacional de los Estados Unidos y sus intereses de ultramar, «Resumen Ejecutivo», “Efectos políticos de los factores de población”: las consecuencias políticas de los factores de población, entre ellos el rápido crecimiento poblacional, «son dañinas para la estabilidad interna y las relaciones internacionales de países en cuyo progreso Estados Unidos está interesado, creando así problemas políticos e incluso de seguridad nacional para Estados Unidos».
11 Decisión de Seguridad Nacional 314/75, del 26 de noviembre de 1975. Recomienda alentar a los líderes de países en desarrollo claves para que «apoyen los programas nacionales y multilaterales de asistencia poblacional», disimular el carácter imperialista de la política poblacional, «trabajando cerca de otros en vez de imponer nuestro punto de vista», y en todos estos esfuerzos en pos del control de la natalidad, «reconociendo la dignidad básica del individuo y su derecho para escoger libremente sus objetivos familiares y las alternativas de planificación familiar».
12 Los detalles de esta iniciativa inconclusa se encuentran en la obra de Stephen Mumford, The Life and Death of NSSM 200: How the Destruction of Political Will Doomed a U.S. Population Policy [Vida y muerte del Memorando Secreto de Seguridad Nacional 200: Cómo la destrucción de la voluntad política condenó a la muerte a una política poblacional americana]. Se puede consultar y obtener este texto en Internet, en http://www.population-security.org/index.html.
13 Op. cit., «1. Fostering an International Consensus for Action» [Promoviendo un consenso internacional para la acción].
14 División de Población, Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de Naciones Unidas, World Population Ageing 1950-2050, «Resumen Ejecutivo»: el envejecimiento de la población carece de precedentes, es general, es profundo y duradero. En este contexto, las personas de 60 años ó más, de constituir el 8% de la población en 1950, pasarán a ser el 22% de la población en el 2050).
 Envio gentileza Dr. Brieba

2 comentarios:

Alan Argento dijo...

Creo que en lo personal casi nadie puede tener una familia numerosa. A esta altura creo que ya se hace difícil hasta tener uno o dos chicos.La gente piensa mucho las cosas antes de hacerlas. El problema es la falta de empleo y la inflación. Encima el poco trabajo que hay no estable en lo más mínimo (precarización laboral, tercerización, explotación, laburo en negro, etc).
Ahora lo que yo noto es que hay gente pudiente que no tiene hijos y, en caso de tenerlos, son dos como mucho. Me parece que Dios le dan pan al que no tiene dientes. En cambio las personas de menos recursos terminan compensando demográficamente a la sociedad argentina (más allá del clientelismo político y el hacinamiento lo positivo es que todavía quede gente en este suelo porque si es por el porteño promedio somos todos gays o tenemos hijos de laboratorio a los cincuenta años si es que no alquilamos un vientre como primera opción de paternidad tardía).
En definitiva, la naturaleza va a juzgar nuestros actos individuales pero de manera social y general. No es por ser redundante con el concepto pero la ley natural no puede ser burlada jamás porque Dios siempre está ahí para castigar el hedonismo de los pueblos.
Los europeos serán muy hermosos, cultos y sensuales pero van a dejar de existir por la fuerza del turco. Lo mismo digo de los yankees: Los gringos son muy inteligentes y creativos pero los mexicanos van a ser mayoría junto a los negros en menos de tres decadas. Acá pasa lo mismo con los argentos hijos de los barcos: Somos muy simpáticos y rosaditos de piel con los ojitos claros pero los bolivianos y los paraguayos tienen muchos crios y eso es lo que cuenta.
Si me preguntan a mí prefiero a la gente de Sudamérica antes que a los chinos y a los israelíes pero no es lo que quiero decir. La xenofobia y el racismo no existen en sí mismo. No hay razas superiores ni inferiores sino pueblos que cumplen con la ley de la naturaleza que indica que el coito es un acto reproductivo y unitivo. ¿De qué sirve toda la ciencia del hombre blanco si el musulmán es el que se dispersa y se multiplica?
Toda la belleza de cualquier ciudad occidental no sirve de nada si sus habitantes no están dispuestos a sacrificarse en pos de la especie. La gente de mierda de hoy piensa solamente en viajar por el mundo, drogarse, ir a los casinos y tener sexo en lugar de formar una familia aun cuando le sobra los recursos para tener cuatro o cinco hijos y más también.
Los burgueses tienen un solo hijo y les sale bobo por ser consentido e hijo único. Idiotas. Tanta pastilla anticonceptiva y tanto estrógeno en el ambiente hace mal a la cabeza. Va contra la naturaleza envolverse en una bolsa de consorcio antes de hacer el amor. Es una locura que hayan mujeres que se liguen las trompas u hombres que se hagan la vasectomía.
Seguramente que en las personas de clase media baja y clase baja tener hijos es complicado dada la falta de estabilidad en este bendito país pero creo que hay que ejercer una fuerte presión social a través de la Iglesia Católica y las asociaciones intermedias. Los subsidios del Estado deberían ser indirectos. Por ejemplo: El Gobierno debería abrir fábricas o crear puestos de trabajo. Si el propio poder político emplea a grandes masas de la población, de seguro que los salarios van a tender a la suba debido a la escasez de mano de obra barata y la falta del ejército de reserva.
Yo sé que algún viejo homosexual me dirá comunista pero no lo soy.También aparecerá el paisano Kackermann para decirme nazi pero tampoco lo soy. Simplemente recojo la Doctrina Social de la Iglesia edificada en un Magisterio de dos mil años de Tradición.
Bueno, luego de leer este comentario espero que reflexionen un poco. El mejor regalo que pueden hacerle a sus hijos son hermanitos. Y si no tienen hijos pueden darle un bello regalo al mundo. Es incorrecto el planteo ese de "no voy a traer hijos a esta tierra para que sufran". Es al revés: Los bebés de hoy pueden ser los héroes del mañana...

Martín dijo...

Que buen comentario camarada