ELECCIONES

Sobre recambios y ausencias

Guillermo Rojas

Otra vez como todas las anteriores nos referiremos al recambio inevitable del sistema que mantiene a la Argentina en la situación que todos conocemos. Hablo de recambio, porque hablar de que el pueblo va a elegir o va a consagrar a los mejores para gobernar podría mover a risa a los lectores y mas allá de que el sentido del humor es un buen síntoma, lo que menos ganas dan es de ejercitar tan noble actitud cuando hablamos de estos temas candentes y preocupantes.

Lo de siempre

Referirse a este periódico recambio de actores es volver a reiterarse por sabe Dios qué vez. La realidad es que las opciones sistémicas no dan para mucha esperanza: Se resumen en dos versiones: los progresistas que quieren continuar con la destrucción desembozada y grosera de nuestra Patria  y los liberales que quieren seguir con dicha destrucción, desde otra perspectiva y de manera que a los burgueses les resulte más elegante.  Dicho de otra forma las opciones se limitan a los que gobiernan hoy, usando del Estado para enriquecerse   o a los que pretenden gobernar para hacer negocios con empresas multinacionales y convertir el Estado  en un contestador automático: los mismos que dicen  que la recuperación de las Malvinas seria una carga más para el Tesoro Nacional,  y afirman no entender los problemas de soberanía "en un país tan grande como este".  Para ambos términos la conciencia nacional no significa nada. Para los progresistas la Patria no existe o es "el otro" y para los liberales la única Patria es el mercado o sea el dinero

 Nos referimos a cualquiera de los personajes del perverso kirchnerismo o al  meteco Macri y sus similares con mayores o menores semejanzas. Lo que se nota a simple vista en ambas versiones del Régimen es la ausencia absoluta de ideas y planes concretos para dar como mínimo un paliativo a los males que sufre la sociedad argentina. A ningún candidato sea del núcleo que sea se le filtra una idea, que no sea más de lo mismo

Allá como aquí

Pero bueno, no debemos asombrarnos de lo que es moneda corriente dentro de este sistema inviable. Nótese que la supuesta alternancia es el emblema político- electoral del Poder Mundial, una alternancia de caras que esconden los mismos amos reales, con diferencia de enfoques metodológicos para llegar a iguales resultados.

 Algo similar ocurre en Europa en los países que son la periferia de la centralidad, donde la realidad se ha impuesto dolorosamente a las cuentas de colores de la usura gobernante y omnipotente. Por ello con parches, la calesita trucha sigue funcionando, al igual que aquí con el apoyo absoluto de la prensa sistémica que formatea el imaginario colectivo no presentando ninguna otra opción posible que las aprobadas por el régimen  como normales y lógicas.

Son los casos de Grecia y España que metidos hasta la verija con el capitalismo financiero, estragados por el endeudamiento crónico, el paro y la pauperización de sus segmentos sociales medios,  han empezado a hacer el recorrido que hicimos aquí en el 2002 con Duhalde y posteriormente con Kirchner

En esos dos países se ha producido un fenómeno bastante curioso. Las piezas del mecanismo de la alternancia han comenzado a desgastarse paulatinamente al influjo de una corrupción absoluta de los  integrantes de ese tablero, que incluye a los horribles personajes  de la familia real en el caso ibérico.

Así es que en España el deshilachado de los partidos que representan esa obra bufa ha terminado imponiendo un nuevo maquillaje. Apareció un grupo parecido al kirchnerismo llamado PODEMOS que viene a reemplazar o aspira a hacerlo al PSOE totalmente desacreditado ante la población por sus mentiras  y por la corrupción absoluta de su cúpula. Es una nueva "ilusión" de las tantas que infectan los afiebrados sueños de la izquierda,  y que va a quedar en eso, por más arrestos chavistas del melenudo que lidera el grupo. La oligarquía global le va a poner los puntos y le hará ver que España no es Argentina ni Venezuela. Podrán seguir destruyendo la cultura y el alma de España con chatarra cultural, pero sin tocar en lo más mínimo los resortes de dominación económica y política en manos del poder mundial

En Grecia sucede algo muy similar. Pero allí el temor es acuciante. Temor de que una opción realmente radicalizada nacionalista y anti sistema se entronice en el poder. Se trata de Amanecer Dorado un partido de cuadros, con una visión absolutamente contraria al poder global y en especial virulentamente anti sionista, y  ya sabemos que el sionismo es el único nacionalismo supremacista que la oligarquía usurera permite, y que es en definitiva el núcleo duro de su ideología. En este caso se han visto compelidos a frenar ese arrollador avance con represión y cárcel de los dirigentes máximos del partido, acusándolos de ridiculeces. Pese a esa escalada represiva Amanecer Dorado se ha convertido, con todos sus dirigentes presos y el descredito de la prensa canalla en la tercera fuerza política griega con un importantísimo  crecimiento. Allí la alternancia trucha colocó en el poder a un partido de izquierda que ya arreglo con los usureros como era de esperarse.

El gran ausente

Volviendo a lo nuestro, aquí la trampa de la dialéctica inducida funciona a la perfección y sin sobresalto alguno, planteada como está en una polarización para idiotas, entre peronismo- kirchnerista (disfrazados de izquierda nacional progresista) y Macri ( que desembozadamente es el proyecto capitalista y mundialista ). Todo marcha sobre ruedas de la mano de la puerilidad de una ciudadanía sodomizada por la prensa sistémica. Una ciudadanía  que ni la realidad que vive a diario la hace recapacitar. Realidad de inflación, miseria, corrupción, droga, delincuencia, muerte e intoxicación contracultural.

Hemos dicho en variados artículos que la gran ausente de la política argentina es la Patria porque el nacionalismo está ausente de la política y que el fracaso del nacionalismo en política es el fracaso de la Argentina como empresa colectiva.

 Desgraciadamente eso va camino a ocurrir si los pocos que componemos este movimiento no recapacitamos y salimos de la confusión de un falso integrismo donde en un mismo bloque presentamos cosas que son de planos diferentes, mezclando religión con política, mezclando el universo de los principios con el del discurso político concreto, sea este ideológico como programático. Si no podemos, sabemos ni queremos bajar a la realidad concreta ese universo de principios inmutables no podemos hacer política para el Bien Común de la Patria y tendremos que resignarnos a hablar para "el auditorio selecto" y nada mas mientras la Argentina desaparece.  Me adelanto a decir ,por las dudas, que al diferenciar planos en el discurso político no pretendo divorciarlos de la moral, sino integrarlos a la misma

Si no renunciamos a la idea partidocrática de aglutinar gente como en una bolsa de gatos, tendremos que conformarnos con ser un quiosquito del Partido Justicialista o de cualquier otro grupo por infame que sea. Ya hay supuestos "nacionalistas" que apoyan a Macri abiertamente de la mano de vendehúmos y de lúmpenes de la política. A propósito de esto hay cosas  que marcan nuestra falta:  el mencionado Macri cuenta como   dirigentes en su partido  a gente que tendría que estar con nosotros, incluso militares de actuación heroica en la guerra de Malvinas. Trabajan para una entidad absolutamente antipatriótica como el PRO o sea trabajan indirectamente para Inglaterra. Tristísimo.

Si no podemos formar una estructura organizada integrada por cuadros políticos esclarecidos que tenga como norte la conquista del Estado como dijera Ramiro Ledesma Ramos, tendremos que resignarnos a la confusión y la dispersión tanto de gente como de esfuerzos. Si no dejamos de formular como dogmas cosas que no lo son, nos condenaremos al inmovilismo absoluto. Lo mismo que si no salimos de nuestros egoísmos personales. Formar cuadros dirigentes debe ser el norte del Nacionalismo hoy. Formar dirigentes idóneos para la tarea política tanto agonal como arquitectónica. Cuadros y organización.

La única esperanza para nuestra Patria es un movimiento nacionalista unificado esclarecido formado por cuadros capacitados, orientado a la toma del poder político, con un discurso político claro y basado en la realidad y sin resignar ningunos de nuestros principios. Eso será lo que más impresionará a nuestros compatriotas.

Si no lo hacemos así, solo queda seguir con la calesita de la falsa dialéctica y la alternancia para conseguir un nuevo personaje de recambio que administre nuestra agonía como Nación.