Kirchner se largó con todo a gobernar por decreto. El determinante: la deuda externa, esa gran ausente en la prensa diaria. Va a hacer cualquier cosa con tal de seguir pagando. La constitución y las leyes no cuentan en un país donde no existe orden jurídico alguno que no sea el capricho o la necesidad imperiosa de la delincuencia gobernante y de la usura mundial. Hablar hoy de legalidad, Congreso, seguridad jurídica etc. solo es discurso propio de la imagineria liberal. Tenemos a la vista el sistema en toda su descarnada realidad. Pero, todavía no hemos visto todo. Épocas peores se avecinan y no falta mucho. Para terminar este breve texto transcribimos algo aparecido en la pagina del Informador Público que puede ser de interés y anticipa el futuro cercano.
"La felicidad de los buitres
"La felicidad de los buitres
El uso de las reservas para pagar deuda pública ya fue una buena noticia para los acreedores externos que buscan embargar activos del Estado Nacional, porque coloca a las reservas a tiro de dichas medidas judiciales. El despido de Redrado como si fuera un ordenanza viene a confirmar oficialmente que la autonomía del Banco Central es una ficción que el gobierno argentino ni siquiera se molesta en simular. Como la propia presidenta decreta que el presidente del BCRA es un simple empleado de su gobierno, Tomás Griesa y otros jueces podrían fallar a favor de embargar activos de aquella entidad, con el simple argumento de mostrar el último DNU."
La imagen es del blog Saleconfritass
2 comentarios:
¡Insensatos! Presentar al Bestia Bisojo con atuendo de rey es infamar un oficio reclamado para Sí nada menos que por el mismísimo Jesucristro, Nuestro Señor, Rey de Reyes, y confundir así al argentino medio, que necesita más un rey santo, como San Luis o Felipe II que caraduras políticos de la catadura presente y conocida.
Alguien que se tome en serio el carácter sagrado del oficio de gobernar, antes que una multiplicación ingeniosa de artificios y engaños y medias verdades que dejen siempre bien parado el gobernate y deshecho al pueblo.
Sencillamente, una contradicción.
Lo tomo como algo propio de la insensatez del plebeyismo republicano que, por desgracia, ensucia vuestra buenas intenciones e inclusive una inteligente y casi siempre compartida visión de la política nacional.
Baste para ejemplo que San Martín fue un monárquico (y no precisamente "constitucional") convencido; y a esta poderosa decisión se debió su rechazo a la paz propuesta por los liberales de la Serna y Abreu, que le exijían jurar la "constitución" de 1812, la ominosa "pepa", a lo que el Libertador se opuso con frenesí. Y creo yo, fue también el motivo de disensión con el pánfilo (y luego arrepentido) de Bolívar en Guayaquil.
Todas estas cosas ofende en un solo gesto el insensato compuesto fotográfico que va a la cabeza de una, por otra parte, interesante nota.
Piénsenlo bien, antes de adoptar acríticamente cualquiera de los fetiches y mitos lieberal-masónicos.
Un amigo
Si vas a desvariar al menos hacelo con nombre y apellido de lo contrario despedite de que te publique. Ricardo
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